Pueblo Viejo, Ver.- Aproximadamente 80 empleados que laboraban en negocios del Paso del Humo en diversas actividades como ayudantes, dependientes, cocineros, meseros entre otros, se han quedado sin empleo durante los meses que ha durado la actual pandemia.

Gabriela G., propietaria del restaurante de pescados y mariscos “Viña del Mar”, manifestó que en su caso, debido a las bajas ventas, tuvo que despedir a tres de sus cocineras, las cuales indicó son jefas de familia que requieren demasiado el trabajo, pero por desgracia ya no tenía para poder pagarles.

Puntualizó que de momento es apoyada por dos de sus nueras, indicando que espera que pasando el problema del COVID-19 pueda volver a contratar a sus anteriores empleadas, citando, además, de ser de toda su confianza son gente que le ha mostrado su lealtad y apoyo.

Don Miguel Reyes del Ángel, también propietario de un negocio del mismo giro, manifestó que actualmente sólo se apoya con su familia, su hija y sus nietos. Esto porque no tiene presupuesto para pagar empleados.

Refirió que debido a la suspensión de clases sus nietos pueden apoyarlo en el negocio, en donde refirió, que la actividad es muy baja por la falta de clientes.

Puntualizó que no hay negocio en el Paso del Humo que no haya prescindido de algún empleado, ya que no hay dinero, y la situación se complicó pues hay muy pocas ventas y desgraciadamente no se les puede pagar un salario.

Detalló que por lo menos 80 personas ya no tienen trabajo. Todos ellos tuvieron que ir a otros lugares para buscar el sustento de sus familias. Dijo que es muy triste lo que está viviendo, pero por desgracia, en su caso ya no tiene los recursos para pagar de un empleado, y en muchos otros comercios pasa la misma situación.

Comentó que no desearían despedir a la gente, ya que en el municipio hay muy poco trabajo y con la pandemia la situación se ha puesto muy complicada.

Por ello, como todos, espera que esta situación termine y la reactivación económica vuelva a lograrse, en su caso refirió que contrataría a las mismas personas que en su momento le apoyaron en su negocio.

Por Francisco Díaz