Odontóloga jamás fue a la escuela y resulta que está a punto de titularse como criminóloga, su esposo es el director de la carrera de Derecho y facilitó todo

Poza Rica, Ver.- Una odontóloga que jamás acudió a tomar clases de Criminología y Criminalística en la UPAV y que tampoco presentó examen alguno acaba de recibir su certificado profesional y pretende titularse como tal; la susodicha fue ayudada por su cuñada, quien fungía como secretaria de dicha carrera y al mismo tiempo por su esposo, quien también labora en la institución y es director de la carrera de Derecho.

Se trata de la doctora Wendy Nancy Tapia Gutiérrez, quien aparece como supuesta egresada de la generación 2014-2017 de la carrera de Criminología, jamás acudió a la escuela y no obstante, recibió su respectiva documentación; este hecho no puede ser obra de la casualidad, ya que todo estuvo orquestado por su cuñada Yeliani Hernández Baltazar.

Las investigaciones de este medio arrojaron que en el fraude se ven involucradas varias personas, y aunque en apariencia son investigadas derivado de una denuncia, no se les ha fincado ningún tipo de responsabilidad. El orquestador principal es Jesús Mario Hernández Baltazar, director de la facultad de Derecho, ubicada en el plantel Conalep 177.

Durante varios cuatrimestres que Yeliani fungió como secretaria de la carrera de Criminología se dedicó a incluir en la lista de calificaciones a su cuñada y posteriormente entregaba documentación oficial a los docentes, quienes firmaban sin pensar que la secretaria hacía de las suyas.

Resulta ser que nadie se percató de lo ocurrido hasta días después de que Wendy, sin tantita pena presumió haber recibido su certificado sin ir a clases, así todo quedó al descubierto.

Se agrega a la investigación de este medio que tan pronto se dieron cuenta, en la universidad se procedió a denunciar el caso ante la UPAV en Xalapa, pero el asunto se ha quedado estancado. Yeliani dejó de ser secretaria y no pasaron muchos días para darse cuenta de qué manera cobró el favor a su hermano y a la esposa de éste.

Y es que a cambio de agregar a su cuñada en la carrera de Criminología, Yeliani también fue incluida bajo el mismo modus operandi, pero en la carrera de Derecho, donde Wendy es maestra y que por cierto estaba a cargo de Mario.

El plan llevado a cabo por las cuñadas parecía perfecto, e incluso el día de la ceremonia de graduación ambas fungieron como maestras de ceremonia y hasta con honores se entregaron una a otra sus respectivos certificados. Dicen los que saben que hasta se hicieron acreedoras a titulación automática.

Actualmente la exsecretaria da clases en la carrera de Derecho, donde su hermano logró acomodarla, pero al mismo tiempo se desempeña como auxiliar administrativo de tiempo completo. En tanto, para dar trabajo a su esposa, Mario Hernández tuvo que modificar el nombre de una materia, cuyo nombre es Deontología Forense y ahora se llama Odontología Jurídica, esto para que su esposa tuviera el perfil para impartir la cátedra.

En un documento dirigido al rector de la universidad, seis docentes se deslindaron de culpa y hacen constar mediante su firma que jamás dieron clases a Wendy Tapia Gutiérrez, y dejan en claro que ella era atendida de manera personal por la ciudadana Yeliani.

Tras el escándalo salió a relucir que varios alumnos de Derecho se inscriben en la carrera pero no acuden a clases, sólo es cuestión de pagar a los docentes y todo queda arreglado; tan es así que hay antecedentes de que se entregaron títulos a policías de la Secretaría de Seguridad Pública, a varios secretarios de juzgados que actualmente corren riesgo de perder sus puestos porque de nada les sirve tener amplia experiencia si no cuentan con documentos que avalen su preparación.

A pesar de que la matrícula de la UPAV bajó de manera considerable, se siguen abriendo carreras en diferentes sedes en varias partes del estado.

Por Clemente Hernández Reyes