EE.UU. – Dos senadores republicanos, Mitt Romney de Utah y Joni Ernst de Iowa, expresaron duras críticas respecto a las acusaciones de fraude electoral hechas por los aliados republicanos que aún tiene Trump, como parte de un intento arriesgado de anular los resultados de las elecciones del 3 de noviembre.

Con un tuit a altas horas de la noche, Romney atacó al presidente, quien no ha podido lograr que los tribunales detengan el conteo de votos en varios estados clave que perdió ante el presidente electo Joe Biden.

“Al no haber presentado ni siquiera un caso plausible de fraude o conspiración generalizados ante cualquier tribunal de justicia, el presidente ahora ha recurrido a la presión abierta sobre los funcionarios estatales y locales para subvertir la voluntad del pueblo y anular las elecciones”, tuiteó Romney el jueves.

“Es difícil imaginar una acción peor y más antidemocrática por parte de un presidente estadounidense en funciones”.

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— Mitt Romney (@MittRomney) November 20, 2020

Por su parte, Ernst criticó el jueves una sugerencia de un abogado que trabaja en el equipo legal de Trump que afirmó que los republicanos y los demócratas podrían haber “pagado para que el sistema funcione para ellos”, haciendo referencia a la Suprema Corte de Justicia, la cual está compuesta en su mayoría por republicanos.

Cabe señalar que Romney fue el único senador republicano que votó para condenar a Trump durante el juicio político el año pasado.

Ernst fue entrevistado en Fox News Radio por, un abogado que está ayudando a la campaña legal de Trump a impugnar los resultados electorales, le preguntó al senador de Iowa sobre los comentarios que hizo este mismo día.

Durante una conferencia de prensa celebrada junto al abogado personal de Trump, Rudy Giuliani, Powell afirmó que el presidente ganó las elecciones y que un software “anuló millones de votos”.

Luego sugirió que los políticos de ambos partidos pagaran para arreglar los resultados.

“No tenemos idea de cuántos candidatos republicanos o demócratas en cualquier estado del país pagaron para que el sistema funcionara para ellos”, dijo Powell.

“Ese es un comentario ofensivo … Para aquellos de nosotros que nos ponemos de pie y representamos a nuestro estado de una manera digna, creemos en la honestidad, creemos en la integridad de nuestro sistema electoral”, dijo Ernst cuando se le preguntó acerca de los comentarios de Powell.

“Creo que si hay fraude, se debe informar a los tribunales … Creo que todos estamos de acuerdo en eso … Pero insinuar que los candidatos republicanos y demócratas pagaron para deshacerse de estas elecciones, creo que es absolutamente indignante”, agregó.

Otro senador republicano, Ben Sasse de Nebraska, también ofreció una evaluación crítica de la conferencia de prensa en la que Powell hizo su acusación.

“Según lo que he leído en sus presentaciones, cuando los abogados de la campaña de Trump se presentaron ante los tribunales bajo juramento, se han negado repetidamente a alegar un gran fraude, porque hay consecuencias legales por mentir a los jueces”, dijo Sasse en un comunicado.

Mientras que otros republicanos eligen no atacarlo directamente, tratando abstenerse de hacer comentarios respecto las suposiciones de fraude electoral de Donald Trump, siendo cada vez más los que han ido aceptando la victoria de Joe Biden.

Tanto Shirkey como Chatfield han indicado que no intentarán revertir la victoria de Biden.

“La ley de Michigan no incluye una disposición para que la Legislatura seleccione directamente a los electores o para otorgar electores a cualquier persona que no sea la persona que recibió la mayor cantidad de votos”, dijo la portavoz de Shirkey la semana pasada.

El 6 de noviembre, Chatfield tuiteó: ‘¡Quien obtenga la mayor cantidad de votos ganará Michigan! Período. Fin de la historia. Luego seguimos adelante ‘.

GDGL

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